La escena política de este ex país sigue dominada por dos minorías polarizadas, cada una empeñada en obtener el control de una mayoría no dispuesta a plegarse.
En ese enfrentamiento, la minoría oficialista cuenta con una clientela politiquera, dignamente tarifada para que cumpla un papel ‘militante’ al mejor estilo acciondemocratista.
A esto se agrega el factor burocracia, la inmensa legión de beneficiados con todo tipo de préstamos y ayudas, un capital bancario-financiero con cada vez mayores ganancias, un CNE y una Fuerza Armada a su total disposición.
Es el completo dominio de las instituciones, con lo cual la minoría adquiere condición de mayoría, comprada y mantenida, pero democrática.
La minoría de las oposiciones evidencia muchas carencias. La más significativa es la ausencia de objetivos. No sabe hacia donde va.
Difícil entonces pensar que, en medio de su dispersión y escasez de recursos propios, se pueda plantear como meta la toma del poder.
A esta hora no disponen de un programa que les permita diseñar una nueva política. Es una fuerza sin pegada ni trascendencia ni recursos para una política de tarifa y populismo.
Pero lo importante es percibir los puntos en común de estos dos bloques: obligar a las mayorías a seguirlos o a correr las consecuencias de recibir el desplazamiento mayor o el propio aplastamiento.
Ambos polos minoritarios requieren, para su subsistencia, convencer a las mayorías que si no se pliegan, no llegarán a parte alguna.
Estamos ante un expaís, en consecuencia, con las patas pa’ arriba y la cabeza contra el suelo.
Una situación al revés, impuesta como normalidad, que ha llegado a los extremos de determinar que Venezuela ya no existe en términos de país-nación.
Ambas minorías acometen la perfecta acción que sirve para que el proyecto de la confederación de dos revoluciones en una: Venecuba, adquiera cada vez mayor piso y fundamento.
Una realidad firme y estable que sólo puede ser enfrentada por una fuerza social organizada con capacidad de lucha para incorporar las grandes mayorías al obligado combate por la conformación de otra Venezuela.
Hasta hoy aquí prevalece la realidad de hace 200 años, una Venezuela pata pa´arriba que parece ir indefectible y lamentablemente hacia un desenlace profundamente violento. Sancho, vayamos tras la historia de acción-pie y cabeza-pensamiento. T:@ablancomunoz
Últimas Noticias, 13 de agosto del 2011.
Saludo cordial. Gracias por su artículo: una gran verdad, trágica y dolorosa verdad que no obstante a pesar de la oposición puede ocurrir en el “país cuero seco” que podamos fundar otra Venezuela.
ResponderBorrarQuien más se ha acercado a imaginarla es Oswaldo Alvarez Paz cuando habla de autonomías de los estados, y presidencialismo parlamentario como en Francia; ni más ni menos que el Estado federal descentralizado o regional o de entidades subnacionales integralmente autónomas; si se le añade a esta visión la
( nacionalización) de PDVSA( ver de A.Quiros Corradi, CUATRO CONDICIONES PETROLERAS en El Nacional del 31/07/11 tendríamos la síntesis del tan ansiado Proyecto de Nuevo: la nueva Venezuela.
La AVERU ( El Nacional 31/07/11) convoca a las universidades a presentar Proyectos país. La UCLA informa que desde hace tres meses elaboran uno; las Academias editan un libro con PROPUESTAS; la MUD informa que tiene 10 equipos de 30 personas( 300 en total) confeccionando el Programa de Gobierno que implementará el ganador de las primarias y casi seguro ( si se impone la sensatez en el Gobierno) de la Presidencia de la República; ID( Iniciativa Democrática; Oscar Lucen, ver SIETE CONSENSOS, en El Nacional del 05/08/11. y en www.iniciativademocratica.org informa que tiene propuestas suficientes como para conformar un Proyecto de nuevo país. Hay suficientes insumos como para obtener un muy buen pertinente y completo Proyecto de Nuevo País. Mi grupo de estudio tiene desde hace un año un Guion ( Borrador cero Anexo) que aborda el origen y la solución de la crisis desde las raíces históricas.
Es deseable que la CPT también elabore su propuesta de país pos tiranía. Atentamente. JB
Si, un país pata pa rriba y cabeza enterrada por el régimen y sus oposiciones. De acuerdo, la mayoría tiene que levantarse ¿pero no cree usted que hay que discutir sobre los pasos que hay que dar, el como darlos y el cuando para que sean efectivos para que pongamos las patas y la cabeza en sus lugares?
ResponderBorrarPedro José Santos
La realidad graficada en la visión expuesta, es como muy difícil desdibujarla con cualquier postura, pero sin afirmarla digo que la entiendo como el sentimiento que se recoge de una inmensa mayoría de la gente, cuando una y otra vez desesperanzadamente, el intento se queda solo en los anhelos de los ofrecimientos programáticos de cada oportunidad. Ahora, sin el optimismo ilusorio, siento que se puede ver a esa sociedad como la que tiene una nueva oportunidad de iniciar un intento más por enderezar la desgracia repetida una y cien veces en los últimos 200 años. Los grandes pueblos hoy pueden contar cuantas veces tuvieron que ensayarlos y cuanto fue el costo de cada intento. Por eso soy de los que se suma a corregir con sensatez las equivocaciones y con sentido histórico promover más allá de los errores que evitaron salir del círculo, la propuesta a seguir. Ahí me atrevo a presentársela, porque desde algún tiempo siento que el camino ahora es el de la post modernidad. http://filosofo-vsol.blogspot.com/p/cpd-centro-de-participacion-democratica.html
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