EL EXILIADO DEL BARRIO
¿FENÓMENO DE LA DEMOCRACIA Y LA REVOLUCIÓN?
Manlio Sardi
CPT -CEHA-UCV, 2013, 624 p.
Agustín Blanco Muñoz
El exiliado del barrio
Habla el banquero Eligio
Cedeño
Caracas, Tomo 26 de la Colección Testimonios
Violentos,
Rafael
Wanderlinder y Nicasia García Cedeño se separaron. Ella se quedó con los dos
hijos habidos en la unión: Santos Luis y Eligio con dos meses de edad. Ambos la
acompañarán en sus múltiples mudanzas por varios barrios caraqueños, unas veces
refugiándose en precarias construcciones levantadas por ella misma y otras, en
cuartos o piezas alquiladas, dentro de una gran pobreza. No obstante, con la
maestra María, Eligio aprendió las primeras letras; luego cursó la primaria
(junto con su hermano) en la Escuela
Enrique Chaumer. Los dos fueron los más
pobres entre los alumnos, los útiles se
los donaba el Hipodromo Nacional.
En la Secundaria
se graduó de Bachiller, doblemente, en el Liceo Agustín Aveledo y, en Insbanca,
del INCE (Escuela Bancaria).
En el
Colegio Universitario de Caracas y se gradúa de Técnico Superior Universitario
en Mercadeo.
La
marginalidad y la pobreza marcó su propio nombre; no se llamó Eligio
Wanderlinder, ni Eligio García, se quedó con el segundo apellido de su madre:
Cedeño.
LOS TRABAJOS
Nuestro
personaje comenzó a trabajar a los diez y seis años. Según la propia
apreciación, sus actividades laborales se pueden agrupar en tres etapas, que
son:
1)
Aprendizaje y preparación. Comprende
su paso por el Citibank y el Banco Royal, allí fue conociendo las tareas más
simples.
2)
El lanzamiento. Eligio se va al
Banco Caracas, a los 24 años ya es su Tesorero y accionista menor
3)
El entrenamiento. Se sucede desde
que pasa a formar parte del Banco Noroco, entidad en la cual prueba su
preparación. Más seguro de si mismo adquiere un puesto en la Bolsa de Valores
de Caracas y funda su propia casa de bolsa: CEDEL, plataforma que le permite
disparar su propio enriquecimiento monetario. Su capital para 1999 alcanza los
$ 10.000.000.
Más
tarde, hace alianzas con otros banqueros para comprar el Banco Canarias, el
Bolívar Banco y Banpro. Luego los vende y obtiene sustanciosas ganancias, no
sin estar exentas estas negociaciones de serios tropiezos, enfrentamientos
personales y otros inconvenientes. Paralelamente adquiere varios bienes en el
exterior: Urbano Express, Revista Blitz, un restaurant en Chicago con Santos
Luis.
Cedeño
relata, a veces con mucho detalle, las incidencias por las que pasó durante las
tres etapas dichas. Para el lector resultarán muy atractivas, porque son
comentarios de una persona que se formó en el acontecer diario de las labores
bancarias de los empleados comunes, de los altos ejecutivos y de los dueños de
capitales respetables.
LOS AMIGOS Y LOS OTROS
Ya
desde su condición de aprendiz, Cedeño, comenzó a ver como algunos compañeros
de trabajo le brindaban su ayuda, incluyendo los que se desempeñaban en cargos
superiores, en tanto que otros intentaban perjudicarlo, casi siempre para negar
sus logros o detenerlo en su ascenso.
Estas
vivencias forjaron en él n carácter cónsono con las labores
que
fue dominando.
La
curiosidad del lector se verá satisfecha
al pasearse por informaciones poco divulgadas, cuyos autores son personas de
diferente condición; expresadas sin difamar, ni descalificar.
APROXIMACIONES POLÍTICAS
Hasta
las elecciones presidenciales de 1997, Cedeño permaneció en el área bancaria y
financiera. Con la llegada de Chávez a la Presidencia ,
se vuelca hacia la oposición democrática al nuevo gobierno: participa en
marchas, facilita dinero, financia acciones de algunos líderes, todo sin
salirse de los predios bancarios.
Cedeño
relata largamente los pormenores de su participación en los hechos de los días
11, 12 y 13 abril, cita nombres de aquellos con quienes hizo contacto, a la vez
que expresa sus opiniones sobre algunos de ellos.
Otros
significativos acontecimientos son, también, comentados: el revocatorio
presidencial, la primera reelección de Chávez, de la cual asegura que el
candidato opositor estaba en entendimiento con éste último.
El
lector acucioso encontrará en estas páginas informaciones interesantes sobre
hechos políticos, que aún hoy no están del todo dilucidados.
La
mezcla de ambas frentes: financiero y político, va a tener repercusiones
decisivas sobre su vida.
En
los primeros años 2000, por intermedio de CEDEL (casa de bolsa) facilita al
gobierno la colocación de bonos en los Bancos, con lo cual, logra éste superar
el cerco financiero que aquellos le han tendido. Cedeño gana bastante dinero y para mucha gente se ha
inclinado hacia el chavismo. Pero él lo niega: sólo se limitó a realizar un
negocio favorable.
Ya
en el 2003, el gobierno le monta ataques destinados a su descalificación y
desprestigio en la opinión pública, le allana sus propiedades, lo llama
corrupto, finalmente, lo apresa por la negociación con Microstar.
Cedeño,
a través de Bolívar Banco convino con la
empresa Microstar, respaldar ante CADIVI la importación de computadoras, por
valor de $ 27.000.000; operación aceptada por SUDEBAN. Las computadoras no
llegan al país, el importador ofrece devolver el dinero a CADIVI, pero la reacción
gubernamental, por intermedio del Ministerio Público es apresar al banquero y
al importador.
El
importador, después de un juicio, fue condenado a ocho años de cárcel. Su
relación amistosa con María Gabriela Chávez queda a oscuras en el libro, pese a
que pareciera ser una razón vital, para la intervención de su padre en el
encarcelamiento de aquel.
Cedeño
permanece en prisión, imputado por la
posible comisión de varios delitos: evasión de impuestos, simulación de
contrabando y distracción de fondos, sin que los fiscales hubieren entregado las pruebas que los
respaldaban.
Muchas
fueron las diligencias de su madre y su esposa, igualmente, los $ 175.000 que
pagaron por un encuentro con María Gabriela Chávez. En cambio un líder del PSUV
le ofreció la liberación si contribuía para la captura de un opositor muy
destacado el 11 de abril, lo cual fue rechazado por el prisionero.
El
expediente del caso fue pasando de juez en juez, sin que en realidad se llevara
a cabo el juicio correspondiente. Por fin, llegó a manos de la juez María
Afiuni, quien decidió la libertad para Cedeño con presentación periódica,
invocando la disposición de la
ONU sobre los retardos procesales,
ciertamente el prisionero había sido imputado por segunda vez, a instancias de la Presidente
del Tribunal Supremo de Justicia, por lo que permaneció en la cárcel un tiempo
indebido.
Bien
prolijo es el relato del entrevistado sobre lo que le sucedió dentro de la
prisión, como en los tribunales. El está, para este tiempo, convencido que su
desgracia fue obra de Chávez, secundado por altos funcionarios del Ministerio
Público y por jueces complacientes; aunque no sabe, a ciencia cierta, los
motivos que la originaron, quizás fueron dos: el financiamiento de un líder
clave opositor y su posterior fuga y la filmación de un video a María Gabriela
Chávez, anteriormente referido, el cual Cedeño dice no conocer.
MIAMI
Al
salir del tribunal de Afiuni, Cedeño en mototaxi, se va al hotel Alba Caracas,
de allí a la casa de una amiga, sus amigos lo recogen y trasladan a la parte
alta del barrio La Vega.
Luego baja a La Guaira
para seguir hasta Adícora (Edo. Falcón). Atraviesa el mar y llega a Curazao. Su
viaje sigue hasta Miami, pide asilo político, permanece en la cárcel de Krome
hasta que logra su ingreso a U.S.A. En esa ciudad funda la televisora SoyTV y vuelve a su vida empresarial, siempre con
la vista puesta en Venezuela.
FINAL
Sin
duda que Cedeño es un caso, no el único, que dejó atrás la vida marginal
gracias a sus dotes personales, el empeño de su madre y a la existencia del
Estado democrático en el país, el cual
abrió caminos para quienes buscaran su personal superación. Su barrio no
es entonces un simple centro de miserias.
A
lo largo de las ocho entrevistas, él va trazando su perfil gracias a las
frecuentes reflexiones sobre si mismo: su origen que nunca olvida, el orgullo
de no haber prostituido su trayectoria pública, las circunstancias particulares
de su vida privada, el cuidado de sus hijos y su esperanza de ver nuevamente a
su patria enrumbada hacia el desarrollo en democracia, entre otras alusiones a
su propia persona.
Quien
desee enterarse de las miserias que reinan en la administración de justicia en
el país, de la corrupción de funcionarios, de la venalidad de algunos jueces,
puerta de entrada para las intervenciones descaradas del Poder Ejecutivo en las
decisiones de juicios amañados, la
lectura del “Exilado del Barrio”, será una fuente excepcional, a pesar de las
interrogantes o dudas, que permanecerán después de su última página.
Un
examen más cuidadoso de los contenidos de estas entrevistas, nos lleva a
descubrir en la trayectoria de Eligio Cedeño, una característica esencial e
histórica de Venezuela, su mestizaje; el cual, se puede hacer extensible a
Latinoamérica y ha llevado a que el lema de
la
Universidad Autónoma de México sea: “Por mi raza
hablará el espíritu”.
Desde
otra perspectiva, que por si sola justificaría la publicación del libro, se
diría que son los relatos del entrevistado, con los cuales devela los procederes
de los gobernantes actuales, ocultos tras una falsa fachada. Una vez más, las
esperanzas de redención de los venezolanos han sido maltratadas, por lo que,
aquellos que vivieron de ilusiones están muriendo de desengaños, según el decir
popular.
¿Pero
un hombre como Eligio Cedeño, que viene de la pobreza más extrema, tuvo, además
de sus propias capacidades, ayuda de lo
que se denominó como democracia y de lo que hoy se entiende como revolución?
¿Es este un caso de redención popular?
En lo histórico lo individual no es determinante pero hay fenómenos de esa
procedencia. Tal vez ahí se pueda ubicar a Cedeño.
Manlio Sardi
01 de agosto del 2013
Información sobre el libro
Tlfs: 0414 333 6515 / fax 212 551 8529
Excelente contenido, muchísimo que leer da gusto entrar a tu blog. Felicitaciones
ResponderBorrarMuy bueno, artículos de actualidad seguro vienen mejores cosas
ResponderBorrar