¿UN EXPAÍS DE PREPOTENTES E IMBÉCILES?
Agustín Blanco Muñoz
A propósito de los dos últimos artículos hemos recibido comentarios, preguntas
e insultos que dejamos de lado. Privilegiamos los mensajes que cuestionan con argumentos o
interrogantes, como el caso de Rosa María Cepeda: ¿Es válido desechar hoy lo
electoral? ¿Una invitación a la violencia? ¿Pero cuándo se alcanzarían mejoras
sociales con una constituyente
originaria diferente a la de 1999?
EL PROCESO DE QUIEBRE Y DESTRUCCIÒN AVANZA
INCONTENIBLE
Obligado volver al dónde estamos y al qué nos está pasando. Vivimos una
de las situaciones más difíciles, apremiantes y agresivas de la historia de este expaís. El proceso de
quiebre y destrucción avanza incontenible. Y se agrava con el actuar
individualista y mezquino que nos han
impuesto y que exhibimos hasta con
orgullo.
Un individualismo que no tiene en
su mira cumplir con una responsabilidad colectiva. Que no actúa como contrario dialéctico de lo establecido sino que
lo convalida. Lo importante entonces no
es enfrentar o derrocar el gobierno de la destrucción sino llegar a un
acuerdo democrático-electoral para que
prosiga la alternabilidad y la ley de la
renta petrolera al alcance de todos.
NUESTRA POLÌTICA SE BASA EN INTERESES PERSONALES
Por esto, materialmente, no existe hoy y aquí quien tenga decisión y capacidad
para cambiar este gobierno. Y la razón es muy clara. Nuestra política se basa
en intereses personales. No en doctrinas, programas ni proyectos ideológicos y
políticos.
Se persigue la toma del poder para un nosotros determinado que no es más
que una suma de posiciones enfrentadas, que se comprometen para disfrutar el
respectivo “contrato social” establecido para
ejercer el control y dominio sobre el resto de la población, alejada de toda
sociedad organizada y ejercicio de la ciudadanía.
Al frente de esta actividad destinada a la dirección política, o control
de los mecanismos del Estado, está una legión de inversionistas que ocupan
el puesto o posición de los históricos
invasores. Lo suyo es detentar y disfrutar
el mando-poder.
DE COLÒN A ESTA PARTE NOS RIGE LA FUERZA-BRUTALIDAD
CONVERTIDA EN PODER
Y para lograrlo hacen valer la
prepotencia que les concede la condición de inversionistas, o
príncipes-jerarcas. Todo lo ponen y disponen. Y hasta presumen de una
inteligencia que ponen al servicio de su empresa. De Colón a esta parte esa es
la “inteligencia” que nos rige. La fuerza-brutalidad convertida en instrumento de poder.
La prepotencia pone a un lado
todo respeto y modestia. Olvida, dice Antonio Machado, que por mucho que
un hombre valga, su valor más alto es el de ser hombre y que por ello, los
grandes hombres suelen ser modestos.
¿SOMOS EN REALIDAD OPOSITORES A ESTE RÉGIMEN?
¿Pero han existido y existen fuerzas con vocación, formación y
capacidad suficiente para enfrentar este monstruo de la
fuerza-brutalidad convertida en inteligencia del y para el mando-poder? ¿Somos
en realidad opositores a este régimen? ¿Hemos establecido cómo enfrentarlo?
¿Hay aquí quien actúe en atención a lo que supuestamente enfrentamos o seguimos
haciendo gala de nuestros rasgos individuales, por lo general encabezados por
la prepotencia, la banalidad, lo superficial y fácil?
A ese sitial nos han llevado y mantienen
quienes a lo largo de 520 años de invasión se han cuidado de proteger
sus dominios. Es una escuela de principios-valores y planes de acción
dispuestos para impedir o suprimir todo tipo de virtudes y en particular las
republicanas a las que alude Simón Rodríguez.
EL PROPÓSITO ES CREAR UNA COMUNIDAD DE SERVILES
Hacia este objetivo supremo ha estado y está dirigido el esfuerzo de la
maquinaria de sometimiento invasora: crear una comunidad de serviles. Gente o
proyectos de gente sin pensamiento, sin iniciativa. Manejables. Vulnerables.
Domesticados.
¿Pero cómo llegamos a esa situación en la que en lugar de un hombre hay
un atrasado, necio, que para colmo se considera más que inteligente, genial y
sin nada que aprender y mucho, muchísimo que dictaminar, determinar?
LA POSICIÓN DE UNO NIEGA LA DEL OTRO
En el cuadro histórico actual lo vemos a diario. Cada uno de nuestros
políticos de uno u otro grupo tiene una posición que los demás califican
invariablemente de “respetable”. Y frente a un determinado problema hay una
multiplicidad de visiones y arreglos.
Pero no hay posibilidad de sumar esfuerzos. La posición de uno niega la
del otro. Pero cuando se detenta el mando-poder esto se resuelve con la
compra-venta a lo interno de apoyos para una determinada y rentable posición.
PREVALECE LA ESCUELA DE LOS PODERES INVASORES
En el caso de las oposiciones no se cuenta con la dimensión de la renta
que otorga el mando-poder. Y este
político se queda en el ejercicio de una prepotencia, que es la máxima
expresión de un vacío generalizado. Es
la misma escuela que nos ha formado a todos como débiles mentales al servicio
de los poderes invasores.
El comer, vestirse y alojarse, según Marx, son las premisas que debe cumplir el hombre
para estar dispuesto a hacer historia. ¿Pero un hombre que sólo haya cumplido
con esos mandatos tiene alguna capacitación que pueda librarlo de la ignorancia?
UN CUASI HOMBRE NO PUEDE SINO PRODUCIR UNA CUASI
HISTORIA
Marx agrega que el hombre no ha llegado a la auténtica condición humana.
Que aún es cuasi-hombre. Entonces no es verdad que con sus premisas esté haciendo historia sino cuasi-historia.
Algo aproximado o en camino de lo que será la verdadera historia del hombre. Y
quede claro que mientras persista ese acercamiento que no termina en hombre,
sigue con vida la imposición.
DE DIEZ CABEZAS NUEVE EMBISTEN Y UNA PIENSA
DICE ANTONIO MACHADO
A este punto se remiten muchos de nuestros malestares. Hay un hacer no
siempre coherente en términos de una lógica. A Machado le impactaba la falta de
pensamiento hace un siglo. Y lo dejaba
saber en clara expresión: “De diez
cabezas, nueve embisten y una piensa. No extrañéis que un bruto se descuerne
luchando por la idea”.
NI GOBIERNO NI OPOSICIÓN SE DESCUERNAN EN EL CAMINO
HACIA LA IDEA
En manos de esas cabezas que embisten está nuestra política, la vida de
la comunidad. La dirigencia gubernamental y opositora ni siquiera se descuernan
en el camino hacia la idea. Este no es un problema para ellos. Sólo se sienten
llamados a cumplir con la compra-venta de votos a una comunidad vulnerable
y domesticada.
Y a esto se llama hoy aquí la
democracia, que se basa en el libre ejercicio del voto. Y así, como gobierno u oposición nos seguirá
rigiendo la democracia o la revolución de y para la imbecilidad. ¿Seremos o no
capaces de levantar conciencia y acción para construir una historia diferente
desde la perspectiva de la
Constituyente de Calle sin firmas, partidos ni CNE?
¿LOGRAREMOS REMONTAR LOS MUROS HISTÓRICOS DE LA
PREPOTENCIA?
¿Lograremos remontar los muros históricos de la prepotencia? No es hora
de disparar sino de acercarnos a la
auténtica condición humana y poner nuestras cabezas, con Machado, no a embestir
sino a pensar para un actuar de ideas que nos libre de toda imbecilidad. ¡Qué
historia amigos! Twitter: @ablancomunoz abm333@gmail.com
El Universal, 27 de septiembre del 2013.
calle.? tambien he apoyado esa idea, pero sin estado de derecho es suicida ponernos en manos de delincuentes, llamese milisianos, milicia obrera, guardia nacional, etc. El dia que tomemos la calle sin partidos, estemos claros que ese dia podriamos morir, quizas asi muera la rebolucion o se fortalezca mas, solo Dios lo sabe.
ResponderBorrarNuevamente un artículo que hay que leer palabra por palabra para entender,porque es tan intrínseco que sólo el autor sabe lo que dice.Y no es que uno sea un prepotente o un imbécil, es que no es claro en su mensaje. Sin embargo,puedo medir el pulso del autor, su desesperanza porque no podrá ver esa sociedad quimérica que imagina, la cual va más allá del socialismo y el capitalismo; de Maduro y de Capriles. En esa sociedad ideal, propia, muy suya e comprensiblemente incompresible para el lector, no se sabe cómo se ha de vivir porque el autor no ha sido capáz de explicarlo en ninguno de sus artículos. Eso sí, ataca a todos y a cada uno de los venezolanos sin distinción de ideologías porque ni en un bando ni en el otro ve la viabilidad hacia su "nueva sociedad".
ResponderBorrarTodos sus artículos van en esa dirección: atacar a todos. Ese es su pan de cada día. Gracias profe por dejarnos, al final, una migaja, una pequeña luz que produce muchas sombras en nuestras mentes, con lo que puede ser la propuesta para llegar a esa "nueva sociedad". Y he aquí que llegamos a esa "constituyente de calle sin árbitros ni líderes en soberanía total y en completa serenidad" que tampoco cala en el pueblo. Al comprender su ideal de sociedad no puedo más que comprender a un hombre que al sentirse tan defraudado de su gente se ha ido a vivir lejos en su pensamiento. Su ideal de sociedad, como su propuesta para llegar a ella están tan lejos de la realidad que no soportan tocar al ser terrenal, común y corriente. Y el autor lo sabe y le irrita. ¿Ahora comprenden por qué somos imbéciles y prepotentes individualistas a sus ojos? Sr Blanco Muñoz, ni su "sociedad ideal" ni su "constituyente de calle" son viables en este mundo. La calle no será más que un llamado al G-2, un llamado a la violencia (de ellos), un allamdo a la prohibición de los partídos políticos, al veto de la elecciones libres y el fin de lo que queda de libertad de expresión. Un llamado a la cubanización total por decreto. ¿Y entonces qué va a decir el profe? Saludos desde la discrepancia total.
ResponderBorrarGracias amigo. Al menos estoy leyendo un razonamiento coherente. Y que más o menos es la pregunta que yo me hago. Será que hay dirigentes capaces no de ser presidente. Sí no de dirigir nuestro país hacia rumbos. Ciertos particularmente no lo veo. Ni de un lado ni de otro Mire amigo en mis 70 años no había visto tanta degradación y sabe una cosa este país esta muy emfermo y la enfermedad es MORAL
Juan Navarro
Yo, en tu lugar, cambiaría el orden del nombre de tu artículo, muy interesante por cierto. Le pondría " Imbéciles y Prepotentes" antes de llegar a la prepotencia la imbecibilidad marca el camino de nuestros políticos de un lado y de otro. Primero estudian, se preparan y gradúan de imbéciles. Luego viene la prepotencia, saben de todo y la sordera se establece en ellos. Saludos cordiales
ResponderBorrarJose Enrique Zamora
Fuerte y directo. Esa debe ser la constante para que la gente reaccione.
ResponderBorrarSaludos desde San Diego CA.
Julio Martínez
Apreciado Profesor,
ResponderBorrarFelicito su valentía y apoyo su posición.
En Venezuela la democracia no es otra cosa que el libre ejercicio de la ignorancia…
Reciba un fuerte abrazo,
Dr. Rafael Arreaza Padilla
Ex Pte. del IVSS
Agustín, si de 10 cabezas, nueve embisten y una piensa, nada que hacer con DEMOCRACIA, las nueve que embisten siempre tendrán el poder. O esperamos a que por lo menos 6 piensen.
ResponderBorrarAntonio Moreno