¡ESTA REVOLUCIÓN NOS LLEVA AL CEMENTERIO!
Agustín
Blanco Muñoz
La expresión
es de un viejo amigo que anda por Caracas. Vino en procura de atención para sus
males y no ha tenido mayor suerte porque, según sus palabras, esta no es la Caracas
de otros tiempos.
Antes por
allá por mis montes, ir para la capital era la envidia de todos, porque existía
la convicción de que este lar era una especie de paraíso. Ahora resulta que uno
lo que consigue aquí es gente angustiada
porque no hay ni lo que se necesita para comer. Y los otros artículos
disponibles están a precios inalcanzables.
Y yo me
pregunto, profesor: ¿qué está haciendo con nosotros esta llamada revolución del
socialismo del siglo XXI? Uno se siente entre atrapado y controlado en medio de
algo que nada tiene que ver con
nosotros. Ahora somos extraños en este expaís, como usted lo llama.
De estas
cosas hablaba con el amigo a propósito
de mi artículo anterior. Y de allí su
pregunta: ¿Y cómo es eso que usted dice
de que “Uh ah Maduro no se va”? ¿De verdad cree usted que ese señor va a aguantar este chaparrón
tanto de la oposición como del gentío cada vez más bravo porque ni teniendo con
qué consigue que comprar?
Para mí esto
se lo llevó el diablo. Y si Maduro no suelta el coroto la cosa se va a poner
peor. No veo salida. La situación es muy difícil y se está llevando a mucha
gente para los camposantos
Ahora usted
dice que aquí no hay voluntad, decisión
ni organización para impulsar un cambio de gobierno y que por ello seguiremos
en lo mismo. Y como usted es el investigador, dígame qué piensa de todo este embrollo.
Voy a
comenzar por lo último. También creo que el camino hacia los cementerios es cada
vez más expedito. En general buena parte de la población ha caído en la
polarización y esto plantea una lucha cada vez más radical.
Es una
creciente confrontación entre dos minorías porque la mayoría de los venezolanos
no forma parte del oficialismo ni de la MUD. Es esa inmensa población empujada
hoy a aguantar la situación creada tanto
por los que ejercen gobierno como por quienes teóricamente hacen oposición.
Ambos violentan
las mayorías con un único objetivo: tranquilizar la gente, llevarla a soslayar
todo tipo de combate que no comience y termine en la única forma de lucha que
para ellos paga buenos dividendos: la electoral.
Este es el
gran negocio en el que está montado el oficialismo. Desde 1999 hasta la fecha
es lo mejor que ha podido pasarle al llamado proceso. Con lo electoral han
hecho y hacen lo que quieren y cómo quieren.
Y la otra
minoría, las llamadas ‘oposiciones’, sienten que están prevenidos y que de un
momento a otro pueden tomar el mando-poder. Son unos políticos que no tienen
mayor noción respecto a lo que hoy se
vive o padece en este expaís-exnación-exrepública-exsoberana.
La MUD y
Capriles no aceptan que estamos en Venecuba y que las directrices de los
hermanos Castro y del G2 son el primer
componente en la toma de decisiones para la conducción de los asuntos de esta
parte de la unión revolucionaria y socialista del siglo XXI.
Hay que registrar
a la vez que aquí por mucho tiempo la mayoría se limitó a seguir los lineamientos
de una u otra minoría. Y eso hizo posible el desastre que tenemos por delante y
del cual todos tenemos responsabilidad. La que hoy gobierna buscó cobijo en los
cubanos quienes encontraron de este modo la forma de sobrevivir. Hoy hay
‘revolución cubana’ porque está presente la venezolana.
Pero ante
esta realidad, los pasos de la mayoría comienzan
a apartarse de los viejos conceptos de
mando-poder. Y por ello ahora estamos ante un fenómeno: de los 10 mil candidatos a
alcaldes y concejales cerca de la mitad corresponde al pueblo-colectivo que
no suscribe las dos minorías.
Eso quiere
decir que el fenómeno del dominio electoral se le puede ir de las manos a las
minorías o a una de ellas al menos. Se levanta ahora una mayoría que puede ir
mañana a otra política.
Por estas
razones el 08D la minoría gubernamental armada de capital-control-demagogia y
trampa-fraude CNE obtendrá la mayoría de los cargos pero no la
fuerza ni la ascendencia indispensables para enfrentar y superar la difícil
situación que atraviesa hoy nuestra Ex-Venezuela.
Seguirá entonces
planteado y se profundizará el cuadro de muerte y destrucción a que usted
aludía. Los actuales gobernantes de Venecuba mantendrán a todo costo su
decisión de posesionarse cada vez más del mando-poder.
Por encima
de la incapacidad e ineficiencia permanecerán
en sus cargos mientras no surja un movimiento con posibilidad de reemplazarlo
con una política distinta y distante de la vieja escuela del golpismo. Un
movimiento con la organización y puesta en acción de la fuerza
social-pueblo-colectivo.
Por eso
hemos propuesto el Movimiento de Movimientos (MdM) como instancia de lucha que
se aparta de las viejas y gastadas estructuras de la burocracia partidista devenidas
en instrumentos para la compra-venta de esa mercancía que se llama voto.
Un MdM que
nos lleve a una constituyente originaria capaz de establecer las bases y
fundamentos de una Venezuela de todos. Capaz de enfrentar la tal revolución
socialista cuyo nivel de miseria se patentiza en la expresión: voy a ver qué
consigo, aunque me lo vendan por porciones: leche, carne, pollo, harina de
maíz, aceite, mantequilla y papel higiénico.
Hoy nadie
puede negar que estamos en una guerra
que dispara escasez, inflación y dólar por encima de los 50 mil bolívares de
antes. A esto llama el gobierno “la guerra económica de la burguesía amarilla”.
La revolución es una inocente víctima y la economía la controla el alto
capital.
¿Dónde
conducirá esta situación de guerra-destrucción? ¿Qué perspectivas tiene este
expaís en el corto plazo? El régimen se va a mantener por las vías de la inteligencia
represiva hasta que no surja un contrario dialéctico.
Mientras, la
angustia-desesperación se seguirá llevando gente por delante, alimentada cada
día más por esta revolución del mismo
asesinato.
Una realidad
que sólo podrá cambiar si la fuerza social opositora se aparta del camino de la
disminución y la dispersión y pone en
práctica un instrumento consciente y organizado que vaya más allá de la
participación en otro festín electoral.
Si existe
otra proposición que no parta de la violencia, debería exhibirse para su
estudio. ¡Qué historia amigos! T: @ablancomunoz
abm333@gmail.com
El Universal, 01 de noviembre del 2013.
Este es, sin duda y como de costumbre en este autor, un excelente análisis.
ResponderBorrarCarmen María Barrientos
Profesor, no pierda de vista que hay muchos que no han ido al cementerio y andan con sus angustias y demás enfermedades de hospital en hospital buscando la ayuda que no consiguen.
ResponderBorrarPedro Olimpo Figueroa
Buenos días Prof. Blanco,
ResponderBorrarEn alguna otra oportunidad, recuerdo que fue alrededor de las elecciones del 7-O 2012, le envie un correo criticando fuertemente su posición, en ese entonces antagonista, con la MUD y que yo veía como que usted estaba errado. Aunque sigo pensando que antagonizar directa y tan públicamente no es lo más conveniente alrededor de fechas de elecciones trascendentales, hoy en día y gracias a sus últimos artículos he llegado a comprender lo que en verdad usted está queriendo decir.
Si no me equivoco usted está abogando por una tercera vía, que aglutine a los que usted implícitamente llama la única mayoría del país. Una tercera vía que se encuentra en todo el medio de la calle y no en las aceras. Si esto es así, pienso que es una noción que está poco a poco calando en más gente. Yo no soy político, ni mucho menos, soy un Ingeniero de 27 años que trabaja en una empresa en Valencia.
Realmente creo que las personas que pensamos que esto se resuelve con una tercera vía distina a las minorías escandalosas y protagonistas, deberiamos empezar a organizarnos e impulsar desde abajo una propuesta de país concreta y detallada (contrario a lo que hace la oposición) y con el firme propósito de organizar este país de manera seria y eficiente (contrario a lo que hace el oficialismo). La cuestión es que como yo no soy político, no muevo masas, no tengo áreas de influencia significativas, no tengo la menor idea de como empezar eso. Usted parece ser el tipo de persona que sabe de esas cosas, sería interesante conocer su propuesta de como debería empezar esto, si es que ya no está en marcha y yo simplemente no me he enterado.
Me causa gran satisfacción reconocer cuando me he equivocado, me refiero a mi comentario inicial del primer párrafo. Aunque probablemente usted no se acuerde del correo al que hago mención, me gusta siempre pensar que tuve algo que ver con el hecho de que ahora en sus artículos ha dejado de utilizar tanto las palabras compuestas con guiones como "golpista-presidente" y cosas por el estio, que fue una de las cosas que le critiqué fuertemente en aquella oportunidad.
Espero que encuentre el tiempo para contestar, sería bastante interesante.
Saludos.
Alejandro Chacin