LAS GUARIMBARRICADAS
Agustín Blanco Muñoz
Don Antero ¿y qué piensa usted de las guarimba-barricadas? ¿Barrerán al
gobierno? Mire profesor, a esta altura de mi vida, no creo en improvisaciones. No
se puede negar que la situación actual es angustiante y que nos impone luchar
contra la inestabilidad, la neurosis y la anarquía que nos trasquilan.
Pero no se
puede saludar el atropello y los enfrentamientos entre opositores. Los
guarimberos entienden que sacarán al gobierno y tildan de cobardes, indiferentes
y hasta de traidores a quienes no logran cuadrar.
Pero Don Antero ¿por qué usted no
los apoya? Ya le dije que yo esa pieza la he bailado. A Betancourt a fines de
1961 se le dijo que venía un ¡Nuevo gobierno ya! Y en 2002 la consigna fue ¡Ni
un paso atrás! Hoy se señala que ¡Aquí nadie se rinde! Esto es lo mismo que ¡El
que se cansa, pierde! Y es que están seguros que va a salir.
Pero quienes lo dicen como que no saben que este gobierno está bien apretado con los militares
y que le mete los altos precios del petróleo a la política para conseguir apoyo
popular y castrense. Aquí a la bodega viene gente que defienden a muerte al
gobierno que les dio su pensión.
¿Visto así tenemos revolución para rato?
¿Tiene vida la protesta estudiantil, popular y la guarimba? Esa
revolución yo no la veo en peligro. Los
estudiantes y la parte de la sociedad que está en la calle, si no cuentan con
cuarteles o fuerza organizada y consciente para impulsar una insurrección, no tumbarán al gobierno.
Y además, profesor, detrás de todo esto está la politiquería. Ayer me
decía un bisnieto que la división y la anarquía se sienten por todas partes y
que en los propios estudiantes hay los
que están con una Junta Patriótica que piensa en un nuevo gobierno y los que
luchan por alcanzar mejoras, respeto a sus protestas y que condenan la
represión, los presos, los asesinatos.
¿Y que seguirá a esta revolución? Mire profesor, primero hay que tener
planes para derrotarla. La MUD lo que quiere es convivir y alternar con ella porque le interesa creer que esto es una
democracia. Por eso negociará en un tal
diálogo de paz con la otra minoría y detener los sin línea.
Entonces pondrán a un lado las razones
de esta creciente guerra del dolor y la
inestabilidad, que el gobierno mantendrá sin mayor respeto a los DDHH. Sancho, ¿cuándo viviremos para la
historia del siempre y no para el Ya? abm333@gmail.com
T:@ablancomunoz
Últimas Noticias, 29 de marzo del 2014.
Profesor, creo que Don Antero nos da un ejemplo de responsabilidad y compromiso. Deberíamos copiarlo y buscar una forma de lucha adecuada para enfrentar este gobierno.
ResponderBorrarPablo Angarita
los guarimberos me recuerdan a los guerrilleros urbanos de los años sesenta, quienes criamos a los pseudolideres de entnces que el gobierno estaba a punto de caer y sólo le faltaba un empujoncito que nosotros, aspirantes a guerrilleros sin capacidad militar ni política, con las armas en a mano le dariamos al régimen de Betancourt, tan legítimo como el gobierno de Maduro, porque surgió de unas elecciones democréticas, sin fraude como nos decian los dirigentes.
ResponderBorrarErrores de tipeo
ResponderBorrarcreíamos
con las a
rmas en la mano
Dos preguntas muy importantes para Don Antero y para el profesor, aunque lamentablemente estoy consciente de que la respuesta no podrà ir màs allà de un mero juicio especulativo. La primera: quienes dirigen las barricadas? Anthony Giddens sostiene que ningùn movimiento social es espontàneo y es evidente que detràs de las guarimbarricadas hay un autor intelectual - o varios -. Lo cual me lleva a un segundo planteamiento. Varias ONG internacionales y gobiernos democràticos han emitido pronunciamientos bastante neutros sobre la situaciòn de Venezuela, instando al gobierno a velar por el respeto de los DDHH. Desde mi punto de vista esto le deja un margen de acciòn bastante largo al régimen venecubano para seguir alimentando su tesis del golpe "fascista" (bien entre comillas!). Hasta ahora Leopoldo Lòpez y MCM, inculpados de cuando delito se ha podido inventar el régimen, han llamado a la protesta pacìfica. Sin embargo, dada la confusiòn y los ànimos enardecidos de quien como bien ustedes lo señalan, consideran traidores a todos aquellos que no estén acuartelados, nadie se ha pronunciado dentro de la oposiciòn para condenar o alentar las guarimbarricadas. Al mismo tiempo, en ciertos sectores del paìs como el Tàchira, estas guarimbarricadas se erigen como mecanismo de defensa... Entonces, mi segunda pregunta es: a quién benefician las guarimbarricadas?
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