HELICÓPTERO EN HORA CERO
Agustín Blanco Muñoz
Tiene todos los elementos de una producción cinematográfica. La típica
novela del hombre-héroe- todopoderoso. Ya hay quienes lo ven como un individuo
que reúne los requisitos para asumir la
condición de nuevo vengador y salvador.
Surge como de la nada la tarde del 27 de junio. Urgente, última hora: un
helicóptero, supuestamente robado en La Carlota y conducido por un desconocido, y se
supone que acompañado, atacó con unos 15 disparos la sede del Min. Interior y
luego se dirigió a la sede del Tribunal Supremo de Justicia al cual lanzó
disparos y 4 bombas, una de las cuales no estalló.
En ninguno de los ataques hubo víctimas. ¡Seguiremos informando. Por
nada del mundo se aparte de nuestra sintonía. Los próximos capítulos amenazan
con más emociones!
De inmediato el aparato de
seguridad estatal abrió averiguaciones sobre lo ocurrido. Nadie tenía idea del
asunto. No funcionó ningún tipo de alerta, radar ni nada parecido. Alguien roba
un helicóptero y cumple una misión sin que nada lo ponga en evidencia o en
peligro. Ni siquiera un sustico.
¿Tendrá algún precedente un evento de esta naturaleza? Apenas es posible
recordar aquel avión que aterrizó en la Plaza
Roja en Pekin en 1987, conducido por el adolescente Matías
Rust o los aterrizajes y los dramáticos y espeluznantes vuelos de Batman.
El 28/07/17 el Min. Interiores
Reverol declara que se ha activado la alarma roja internacional contra aquellos
que atacaron la sede del MIJ y el TSJ desde un helicóptero, que fue localizado
abandonado en Osma, Estado Vargas.
Señala además que estaba tripulado por Oscar Pérez, un oficial desertor
del CICPC, vinculado con la CIA ,
con la Embajada
Norteamericana y nada tendría de extraño que tenga protección
de alguna buena brujería, tipo babalao.
Sólo faltó por referir que Pérez hizo valer su ojo pelao para evadir un
simple aterrizaje y tratar de lograr, como en efecto lo hizo, un aterri-topochos.
Su nave bajó con cuidado y se abrió espacio en la siembra. Allí pudo el
arriesgado aviador, abastecerse de los topochos necesarios, para tener las fuerzas requeridas y remar la lancha que le llevaría
a alta mar, vía un simulado exilio.
Y quede claramente establecido que el propietario de la parcela es el único detenido en este affaire. Y se le investiga hasta las últimas consecuencias por ser productor de ese energético alimento que se califica como el máximo culpable de la fuga del piloto del siglo. ¡Productores de topochos, contad con la cárcel aun cuando seáis inocentes!
En esta misma fecha, el 28/06, el Min. Información hace la narrativa del
“atentado”. El Min. Defensa es el último en pronunciarse. A nivel internacional
fue escasa la atención prestada a este acontecimiento que luce, desde un inicio, como un espectáculo que
inspira muy poca credibilidad.
Este episodio, con todos los rasgos de lo novelado y del humorismo bufo, se pone rápidamente a un
lado. Se convirtió en un silencioso hazme reír. Porque a tan noticioso atentado
no se le consiguió patas ni cabeza. Por donde se le miraba aparecían puros
agujeros.
Pero en la noche del 13 de julio en una especie de arte y magia, reaparece
en la Plaza Altamira
el excéntrico hombre helicóptero. Se
presentó en moto a participar en el
“homenaje a los caídos”. De inmediato se hizo centro de atención. Fue
entrevistado por medios nacionales e internacionales. Todo un héroe en plena
faena.
Para Oscar Pérez, una vez que el pueblo decida el domingo 16, comenzará
la “hora cero” que dará paso a la “calle sin retorno”, el trancazo nacional y a
la huelga general indefinida. Se echará el resto, ni un paso atrás, porque no
hay nada que perder.
Reitera el aviador de este modo que vamos hacia un enfrentamiento
radical llamado a impedir las elecciones
para elegir los miembros de la
Constituyente convocada para el 30 de Julio.
Y con la misma facilidad con que
llegó, y una vez lanzado su jugoso discurso, Pérez se retiró sin problemas de
un escenario que siempre está vigilado e infiltrado, gracias a sus facultades
de capitán de altísimas maravillas.
El tipo emprendió su vuelo de retirada por las puertas más voluminosas e
iluminosas. Mientras, La totalidad de
las policías se hicieron las desentendidas y cinco días después no hay el más
mínimo comentario de las mismas sobre el personaje que, supuesta y penosamente,
“más y más buscan”.
¿Pero habrá alguien que aún piense que Oscar “Batman” Pérez es un
opositor que forma parte de quienes encabezan las luchas contra esta dictadura?
El aparato represivo del Estado, a su vez, ha guardado estricto silencio
respecto al “desafío del hombre del helicóptero”. El patuque se hermana con la
burla y la confusión.
Y la conclusión parece muy clara: ya es inevitable la guerra entre la
imposición constituyente y el respectivo rechazo de la MUD. Los dos monstruos
llevan sus partidarios a una confrontación que se mantendrá en un contexto de
violencia.
Ratificará su imposición la parte que tiene la mayor fuerza. Y como en la
casi totalidad de las guerras, los
vencidos habrán dejado en el camino buena parte de los recursos y la
credibilidad que les quedaba.
¿Se asumirá entonces la guerra
permanente o se irá hacia el armisticio-paz luego de profundizar más esta
tragedia? ¿Habrá alguna mesura para detener los escenarios de la muerte?
¿Se seguirá jugando aquí al ofrecimiento de la conquista de una libertad que hasta hoy, y
por desgracia, sólo deja un registro profundamente trágico?
¿Algún día quedará en el olvido y desechado todo anuncio de los
aviadores de la aventura de supuestos beneficios compartidos?
¡Qué historia amigos!
abm333@gmail.com
/ @ablancomunoz
17 julio 2017
Muy bueno...
ResponderBorrarconFUSIÓN genera la poca capacidad de respuesta de represión de un régimen represor y la falta de posición de la oposición, acerca de este personaje y sus acciones.
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