miércoles, marzo 12, 2008

¿SE ESTÁ CAYENDO ESTE GOBIERNO?


La situación es alarmante. El comentario está generalizado: la lucha es a cuchillos rojos rojitos y tiene en jaque a este régimen que se cae por su propio peso pero que consigue, como muros de contención y salvación, a ‘las oposiciones’ que han decidido mantenerse alejadas de la sobre-descomposición, para quedarse a la espera de que el golpista presidente (GP) entregue pacífica y electoralmente el 23 de noviembre.

AQUÍ SE CONTROLA PERO NO SE GOBIERNA

Por lo pronto la táctica es pedirle que gobierne, es decir, que cumpla con lo que ellos consideran imposible porque el equipo que encabeza el jefe único ha controlado pero no gobernado. Con esta petición la gente se dará cuenta que no hay gobierno y procurará conseguir uno a partir del día de las próximas elecciones. La gran derrota dejará en evidencia la pérdida de popularidad del GP y entonces se decidirá una candidatura unitaria para enfrentar a quien sea el candidato del oficialismo en diciembre del 2012.

Este planteamiento de tan contundente simplismo es el predominante en este momento: a partir del 02 de febrero del 2013 tomará posesión un presidente que sí va a gobernar. Estas ‘oposiciones’ a la vez, no parecen estar en condiciones de entender que para este “proyecto revolucionario” gobernar es destruir todo lo existente para establecer un supuesto nuevo sistema que mientan ‘socialista del siglo XXI’.
Y no lo comprenden porque las propuestas opositoras se limitan a la búsqueda de candidatos que tengan posibilidades de alcanzar el objetivo de cambiar a unos destructores que dicen andar tras un cambio de sistema por otros que no se propongan cambiar nada de fondo.

PROLONGAR EL PUNTOFIJISMO

Lo importante para ellos es que siga rigiendo el ‘modelo democrático’ nacido en 1958 y que adquirió definición y perspectivas con la ‘doctrina’ que emana del ‘Pacto de Punto Fijo’. Un modelo que tiene su base y fundamento en el voto para elegir los gobernantes que están obligados a respetar la regla suprema de la alternabilidad. Con base a esta orientación estas ‘oposiciones’ sostienen que la salida a la profunda crisis que padecemos es olímpica: una competencia por el triunfo en la cual están muy claramente definidas las reglas de cada juego.

LA POLÍTICA SALVAGOBIERNO DE LAS ‘OPOSICIONES’

¿Pero qué gobierno asume y respeta el estatuto que rige la competencia electoral? ¿Quién puede negar que aquí el principal mecanismo electoral es el acuerdo-negociación? Lo planteado, en consecuencia, apunta hacia un pacto que impondrá la propia realidad. Progresivamente el llamado gobierno se dará cuenta de que no puede ejercer sus funciones, que el ex-país se le fue de las manos y se convencerá de que lo mejor es acordar una retirada honorable y digna. Y todo conducirá a un festivo y democrático acto en el cual se le transferirá la banda presidencial, previa entonación de las gloriosas notas del Himno Nacional, al presidente electo de ‘las oposiciones’.

Esta es una política salva gobierno de las más efectivas y contundentes, que ya tiene unos cuantos capítulos andados. Después de las derrotas del año 2002, 11 de Abril y el llamado Paro Petrolero, comenzó el ciclo electoral que domina la escena actual, siempre a favor del régimen que mantiene total dominio y control del CNE. De modo que por ninguna parte se ve una salida electoral que tenga algo que ver con cambio sino con el tradicional ‘más de lo mismo’.

DE LA CUOTA DE CACAO A LA PETROLERA

Y esto se plantea en un momento en el cual la maquinaria gubernamental da claras señales de agotamiento. El espectáculo fundacional del PSUV, la intensificación de la implosión-anarquía demuestran que esta ‘revolución’ no tiene posibilidades de formar un instrumento político con una clara armadura ideológica. El ‘Partido Unido’ es la continuación de cualquiera de los partidos que se ha creado en este ex-país con el propósito de ‘regir su destino’ al precio de una cuota que una vez fue de café, cacao, añil y que desde comienzos del siglo XX es renta petrolera.

De modo que desde entonces el camino del poder significa el aprovechamiento de una riqueza para los intereses de la clase que se representa. El PSUV es una institución en la que se concentran todos los focos de interés que pugnan por la obtención de la mejor tajada. Por ello lo largo y tortuoso del proceso de fundación en el cual se ha hecho una inversión multimillonaria no solo en la logística sino en la compra de alianzas para que el GP, al fin, tenga su partido, al igual que todo el autoritarismo-positivismo del pasado.

LA DERECHA ENDÓGENA EMPUJA AL GP
HACIA EL CENTRO

El gran drama reside en que a lo interno de la organización se ha creado un poder superior que se denomina hoy la ‘Derecha Endógena’, con Diosdado Cabello a la cabeza, que obliga al jefe único a posiciones de centro debido a que en el otro extremo están los radicales que, en medio de su creciente multiplicidad y divisionismo, presionan para que se cumpla con lo que llaman la ‘verdadera revolución’ y se proceda a un ajuste de cuenta con la clase que ejerce la dominación.

Una posición peligrosa que obliga al centro a hacer alianza con la derecha para mantener el necesario y conveniente equilibrio. Porque el poderío de la derecha no le permitirá mayores espacios de poder a los radicales ni a los “infiltrados” que se le juntan. Porque cuando el GP dice: “El imperio me quiere derrocar con infiltrados’ ( UN, 01/03/08, p.18) alude expresamente a unos radicales que logran el acercamiento de otros sectores. Y ante la necesidad de buscar una separación de las fuerzas, acude al expediente de señalar a los metidos a radicales como “infiltrados” al servicio del imperio.

LOS RADICALES CONTRA EL GP

La toma del Palacio Arzobispal el 27/02/08, que opaca la liberación de rehenes por parte de laS FARC, no es una operación contra los “curas imperialistas” sino contra el propio Chávez y ‘su derecha’. Por ello el jefe único se ve obligado a enfrentar a Lina Ron y sus “infiltrados”, renglón del cual podrían formar parte los tres diputados acompañantes y el propio Tascón.

EL MIEDO AL 27F-89

Y mientras la operación Arzobispal anula la Serie II del Espectáculo de los Rehenes GP-FARC, el vicepresidente Ramón Carrizales va a la Asamblea Nacional a dar cuenta de las últimas realizaciones gubernamentales y comienza por señalar que ...“Nuestro mayor reto es que un 27 de febrero no vuelva a ocurrir.” Se refiere de este modo a la angustia de un régimen obligado a echar mano del 27F-89 para defenderse. Si no hacemos las cosas bien vendrá un 27F.

Las condiciones están dadas. Las miserias de hace 19 años están multiplicadas. Pero lo más grave es que ahora el estallido contaría con un componente que actuaría directamente contra intereses de la propia revolución. Contra la derecha y el centro. Contra lo que vienen considerando como ‘poder constituido’ que debe ser arrasado por el auténtico poder constituyente. Por la fuerza del pueblo, de las bases. De este proceso pueden salir resultantes hasta ahora impensadas.

Esto significa que el modelo bolivariano-socialismo del siglo XXI se va a pique en medio de una gigantesca lucha de poderes que hacen de Venezuela un ex país cada vez más provisional y quebrado en el propio centro de su corazón económico. Pdvsa no sólo está endeudada y sin posibilidades de desarrollo en el plano productivo sino desfigurada en su misión fundamental. La ineficiencia gubernamental obliga a los ‘aliados de la revolución’ a concentrar el poder económico, repartírselo y a poner al propio ente económico al frente de proyectos que sirvan para mantener tranquila y controlada a la población.

LA ORGANIZACIÓN DEL ROBO

Es la única manera como puede organizarse el robo y lograr a la vez que cumpla con algunos cometidos. Hoy la petrolera reparte presupuestos para ‘obras sociales’ en alimentación, vivienda, educación y cada una de las partes encargadas pueden obtener un beneficio a la vez que prestar un servicio. Este muro de contención que constituyen ‘las oposiciones’ se extiende más allá de la vía electoral.

Hay quienes piensan que ante un gobierno debilitado se debe actuar ya. Pero no tienen fuerzas que exhibir. No cuentan con un colectivo dispuesto a coger la calle sin importarle los riesgos ni con fuerzas armadas decididas a dar un paso al frente. Claro, la desesperación ‘crece a paso de vencedores’ ante la ineficiencia de un régimen millonario que no puede resolver problemas como el desabastecimiento, pese a contar con un petróleo a cien dólares.

HAY QUE DETENER LA MASACRE ANUNCIADA

Pero ese colectivo levantado puede tomar el camino de la anarquía e ir por las cabezas responsables de sus miserias. Y todo se vuelve más difícil, a propósito de los conflictos internacionales que pugnan por el control de las fuentes de energía latinoamericana, y que recaen sobre este ex-país, aún disfrazados por espectáculos como el que acaba de producirse en la Cumbre del Grupo de Río en República Dominicana, donde se postergó por la vía diplomática una confrontación que parece conectada a la lucha de los poderes mundiales.

Por ello seguirá la expectativa y la incertidumbre. Y ese cuadro general puede incidir en la crisis que padecemos y llevarla a niveles de una mayor tragedia y aumentar el espacio de nuestros padecimientos. Se puede ir entonces y con mayor facilidad a colocar de par en par las puertas de una suerte de guerra civil. Esto no significa que en lo inmediato esté planteado aquí la caída de este régimen, que se mantendrá mientras lo dispongan las ‘oposiciones’. Indispensable por tanto, que la Tercera Venezuela adquiera exacta conciencia de esta realidad y contribuya a detener la destrucción-masacre que nos hunde cada vez más!!! abm333@gmail.com

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