viernes, febrero 05, 2010

¡DÍGAME SI NO ESTUVIERA PONCHADO!


Según los estudiantes, que se hicieron eco de la expresión acuñada por Pancho Pepe Croquer, para dictaminar la condición de quien recibía el tercer lanzamiento strike out o el que se fajaba a tomar el sabroso ponche crema de Heliodoro González P, el golpista-presidente (GP) está ponchao.

Dígame si no estuviera ponchao. Porque si no fuera así, y estuviera en pleno turno al bate, tendría la posibilidad de meter hasta cuadrangular, o de acabar con lo que queda de este ex país.

Y está fuera del juego porque no ha podido resolver tres grandes males: agua, electricidad e inseguridad. Esos tres lanzamientos por el centro del plato lo ponchan.

Aquí la cosa sería más o menos fácil si el único ponchao fuese el GP. Pero resulta que la cosa va mucho más allá. Aquí también están ponchaos los medios, los estudiantes, los sin cupo, la sociedad civil, militar, la banca, la industria, el comercio, los obreros, empleados, desempleados, trabajadores informales, amas de casa, militantes de los partidos políticos, dirigentes, policías, hampa organizada y espontánea, pobres y clase media, ricos y alta burguesía.

Todos hemos sido o estamos ponchaos. Y hemos quedados y muchos estamos aún con la carabina al hombro. Quedamos de cualquier color, la vimos pasar rauda y veloz y nos ponchamos sin tirarle o tirándole. Es lo mismo para las cuentas finales.

La política aquí tiene un rasgo fundamental: está conformada por ponchaos, por actores que han recibido y reciben con mucha frecuencia el tercer strike que los pone out.

En un momento determinado (ABM, Habla el Cdte. Caracas, UCV, 1998, p, 368) el hoy supuestamente ponchao observa que el gobierno Caldera avanza hacia la pinochetización.

Y esto es lo que dice: “Como se preven pequeñas explosiones, saqueos, focalizados o no, ahí está la guardia y la policía en la calle, matando de manera extraña a dirigentes estudiantiles, muchachos nuestros que los capturan y les queman los brazos y los sueltan en las autopistas, la represión, la intimidación, detenciones masivas en varias partes del país. Avanzamos hacia un Estado más autoritario, más represivo y de un corte dictatorial fascista.”

El régimen actual da plena continuación, mejora y supera cualquier práctica represiva y la lleva a los niveles que corresponden a un Estado abiertamente fascista.

El GP ha puesto en práctica lo que ha anunciado. Y ha llevado a las ‘oposiciones’ a aceptarlo como si se tratara de un régimen democrático, hasta el punto que pretenden poncharlo por la vía del voto.

¿Por qué no admitir entonces que los verdaderos ponchaos militan fundamentalmente en unas ‘oposiciones’ que han aceptado ser conducidas por la propia política gubernamental? ¿Dónde está la política puesta y dispuesta para enfrentar el fascismo admitido y declarado?

El GP señala que frente a “un Estado abiertamente fascista nosotros también tenemos un plan al respecto. No vamos a esperar cruzados de brazos, que nos fusilen a todos, uno por uno. No. Tenemos también fusiles y tenemos como fusilarlos.” (Idem)

El supuesto Estado fascista de los tiempos de Caldera II entregó por la vía de los votos. Hoy aquí en VENECUBA nadie puede concebir un limpio y trasparente proceso electoral.

El peso del neofascismo es más que evidente. Y nadie que se precie de serio y riguroso puede decir que este régimen del acoso y la destrucción está ponchao. ¿Habrá hoy aquí alguna disposición para construir una política capaz de enfrentar este neofascismo?

La mayoría de la población que rechaza los monstruos del oficialismo y ‘las oposiciones’ está obligada a organizarse para constituir la base de sustentación de la política que impulse una verdadera democracia en este ex país. De no ser así, el ponchao seguirá ganando el juego. abm333@gmail.com

El Universal, 05 de febrero del 2010.

7 comentarios:

Anónimo dijo...

Amigo:

Excelente tu artículo de hoy en El Universal. Ojalá despierte a la
gente que anda con una ilusión "inducida".

Saludos,
Nacho

Anónimo dijo...

Muy bueno, profe. Esta también pasó por toda la goma.
Salud
Jorge

Anónimo dijo...

Verdades del tamaño de la Catedral de Sevilla, Agustin...Opino igual, no esta ponchao y le vino tremendo refuerzo del lado insular de venecuba.

Anónimo dijo...

Verdades del tamaño de la Catedral de Sevilla, Agustin...Opino igual, no esta ponchao y le vino tremendo refuerzo del lado insular de venecuba.

Anónimo dijo...

*MANIFIESTO DEL 4F DEL 92 A LA LUZ DEL 2010*

* *

*En el rol de "herederos del Ejército Libertador" los comandantes del 4F produjeron una rebelión armada, como un llamado a salvar la nación y un derecho de revolucionarios*

* *

*"La acción militar que se llevará a cabo inmediatamente tiene como propósito desalojar del gobierno a quienes han envilecido paulatinamente el alma de nuestra República de Venezuela. *

*Nosotros, como militares herederos del Ejército Libertador, no podemos permanecer indiferentes a lo que hoy sucede. El inmenso grado de corrupción que plaga todas las esferas de nuestro país, la gran cantidad de privilegios con que cuentan algunos, la falta de castigo a las personas que todos sabemos culpables de haber tomado indebidamente dineros públicos, las políticas económicas que colocan en posición deplorable a los venezolanos más sencillos, la venta a consorcios extranjeros de nuestras empresas fundamentales, la imposibilidad que tiene la gran mayoría de los venezolanos para satisfacer sus necesidades básicas, la ineficiencia del sistema y de todos los servicios públicos y en fin el desconocimiento de nuestra soberanía en todos los terrenos, nos fuerzan a tomar una acción destinada a reivindicar la democracia. *


VP

Anónimo dijo...

Profesor, le faltó referirse a los Analistas Políticos, como los llamados blindados Rafael Poleo, F Massó, Quiroz Corradi, Carlos Blanco,etc que quedaron ponchaos desde el Revocatorio del 15 de agosto del 04.

Julio Pereira

Anónimo dijo...

Estimado Señor Blanco, leí con sumo interés su articulo "Digame si estuviera ponchao". Aunque difiero un poquito con su contenido; debo felicitarlo y agradecerle la luz que nos proporciona y el profundo análisis de estos dificiles momentos.
Saludos,
Armando R. Velutini